Mi Marca preferida de carros siempre ha sido BMW, y este carro es una razón más para la larga lista por la cual BMW me parece la mejor marca.
Con este carro BMW reivindica su lado más radical con esta nueva versión del M3, que elimina la mayor parte de los elementos superfluos para darlo todo en la pista. Eso sí, tiene climatizador y control de estabilidad.
El M3 GTS es una variante del poco afortunado comercialmente hablan
do M3 actual, modificada en todos los apartados. Pensado para participar tal como se pone a la venta en las carreras“clubman” -tan habituales en otros países y desgraciadamente tan desconocidas en Perú- opcionalmente podrá homologarse para circular por la calle, aunque BMW deja claro que no será el
coche ideal para ir a la compra y como ejemplo de uso pone el desplazamiento hasta los circuitos en los que se le vaya a hacer correr.
La cilindrada se incrementa a 4.4 litros (4.0 en el M3) y la potencia aumenta 30 caballos, hasta los 450 cv. Dentro del motor hay cambios propios de un coche de carreras, que va a tener que estar a
l máximo de revoluciones y sin tiempo de descanso: cárter de aleación especial de aluminio, mariposas individuales y lubricación especial. Se reduce el peso de la carrocería y cuenta con elementos aerodinámicos ajustables a las necesidades de cada circuito: el deflector delantero y elspoiler trasero, este últi
mo basado en el del 320si del Mundial de Turismos. Estéticamente, las branquias laterales que en el M3 de serie van cromadas en plata, en este son de cromo negro. El adelgazamiento se ha logrado tocando muchos apartados: silenciadores de titanio, consola central y paneles de puertas ultraligeros, insonorización específica no tan confortable como en el modelo estándar y supresión de los asientos trasero
s. En definitiva pesa menos de 1.500 kilos con jaula de seguridad trasera (no integral) frente a los 1.675 del modelo "convencional" y estará preparado para equipar arneses de seis puntos.
La suspensión, aunque basada en la del M3, está puesta a punto para la
competición y tiene un tren trasero modificado, unido al chasis del coche eliminando los elementos elásticos y con regulación en compresión y extensión de los amortiguadores. Las llantas son de 19 pulgadas, ultraligeras y de competición, y la a transmisión deriva del sistema de doble embrague opcional del M3 “de calle”, denominado DKG y que cuenta con siete relaciones. Sobre esta base, que cuenta con palanca en la c
onsola y botones en el volante para su manejo, se ha trabajado para reducir al mínimo el tiempo de cambio de marcha. El sistema frenos está compuesto por pinzas fijas de seis pistones en el eje delantero y cuatro en el trasero, con discos flotantes en ambos casos. No renuncia al control de estabilidad DSC, aunque especialmente programado para competición.
En el interior todo está pensado para disfrutar pilotando: asientos baquet, paneles de fibra de carbono o volante acabado en piel vuelta, extintor y preinstalación de cortacorrientes. Eso sí, se mantiene el aire acondicionado y el equipo de sonido, porque a su propietario le gustan las carreras pero
seguramente también escuchar a Pink Floyd y bajarse del coche después de una buena tanda sin síntomas de agotamiento… para eso pagará 119.000 euros por un auténtico coche de carreras que sin embargo no sería competitivo en ninguna categoría oficial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario